Nuestra relación con Dios puede ser definida de varias maneras:
- No conozco aún a Jesús.
- Lo he conocido, pero aún no tomo la decisión
- Recientemente he tomado una decisión.
- Hace tiempo que ya acepté a Jesús en mi corazón.
Hay diferentes formas de llegar a tomar LA decisión de dejar entrar a Jesús en nuestros corazones. A veces es mediante el testimonio de alguien, una prédica con la que nos llegamos a sentir identificado, una situación extrema (muerte de alguien, accidente, etc.), algún campamento, EJE, o simplemente pasa de a poco a medida que lo vamos conociendo a él.
- No conozco aún a Jesús.
- Lo he conocido, pero aún no tomo la decisión
- Recientemente he tomado una decisión.
- Hace tiempo que ya acepté a Jesús en mi corazón.
Hay diferentes formas de llegar a tomar LA decisión de dejar entrar a Jesús en nuestros corazones. A veces es mediante el testimonio de alguien, una prédica con la que nos llegamos a sentir identificado, una situación extrema (muerte de alguien, accidente, etc.), algún campamento, EJE, o simplemente pasa de a poco a medida que lo vamos conociendo a él.
Una vez que aceptamos a Jesús en nuestro corazón, podemos decir que comenzamos a tener una relación con Dios, la cual es estrecha y va a depender de cada uno de nosotros de cómo la llevemos adelante. Hay que trabajar en ello, ser concientes de que ya no somos igual al resto del mundo, muy por el contrario, somos muy distintos ya que conocemos el amor de Dios.
Necesitamos realizar algunas cosas que nos van a ayudar a poder desarrollar esta relación: orar es muy importante, asistir a la iglesia o relacionarnos con algún grupo cristiano de apoyo, estudiar la biblia y ser perseverante en intentar actuar como cristiano.
Lo importante es siempre saber que si bien fallamos, Dios nunca nos falla y siempre nos acompaña no importando lo que nos ocurra.
Pero, ¿ya has tomado esa importante decisión?
Por Pamela Castillo
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